Luego de una explosiva presentación en el Quilmes Rock 2025 y en el Estadio Obras, el power trío formado por Gabriel Pedernera, Brenda Martin y Lula Bertoldi, llegará en un formato íntimo.
Eruca Sativa se presentará el viernes 8 de agosto en el Niceto Club.
Las entradas ya están a la venta desde hoy en la web de Passline en este enlace.
Eruca Sativa: entre la memoria y el presente, el fuego sigue encendido
“Nuestro segundo corte es lamentablemente muy actual”, lanza Lula Bertoldi, con la claridad de quien no esquiva lo incómodo. Se refiere al tema que estrenaron recientemente y que, aunque fue escrito en diciembre de 2023, hoy parece un reflejo de lo que ocurre en las calles. “Sigue reflejando una situación cotidiana que nos despierta mucha bronca: la distracción desde quienes tienen el poder hacia el pueblo para generarnos divisiones, para que nos sintamos desconocidos y opuestos y perdamos el tiempo en pelearnos entre nosotros”.
Después de un 2024 consagratorio, que incluyó Vorterix lleno por triplicado, un Movistar Arena debut y hasta ser teloneros de Roger Waters en River, Eruca Sativa no pierde de vista lo que pasa afuera. “Creemos mucho en la unión de las personas para lograr cambios increíbles, no solo en nuestro país sino en toda la humanidad”, dice Lula, tajante.
La banda también formará parte del Quilmes Rock, donde tocarán el sábado 12 de abril en Tecnópolis. Pero más allá de fechas y escenarios, lo que se nota es un momento de introspección y reafirmación del trío. “El aburguesamiento existe. Es real. Hemos logrado que se retraiga. Tenemos que tocar y componer para combatirlo”, afirma la guitarrista.
La pandemia, el aislamiento y hasta la maternidad forzada por riesgo sanitario, sirvieron para que Eruca se detenga, se mire, y decida. “Estábamos lejos de esa frescura que nos identificaba. Tuvimos que tomar decisiones en la onda ‘Che, ¿qué vamos a hacer?’”, cuenta Lula. “Sí, sí…”, agrega Gabriel Pedernera ante la pregunta de si la continuidad de la banda peligró. “Está bueno que algo tan seguro esté en peligro porque así valorás otras cosas”, completa Lula.
Para Brenda Martin, la clave fue otra: “Está bueno valorar las pequeñas cosas que logramos como partes de una banda. Esa energía individual, que se genera en compromiso con los otros, también le llega al público. Para encontrar eso, hacemos de cuenta de que todo el tiempo estamos en el día uno”.
El presente de Eruca también se alimenta de su historia. “La época en la que nos juntamos por primera vez, en la que el Titi (Rivarola) tuvo una incidencia fundamental... ese fue nuestro highlight”, confiesa Lula. Y entre risas, anécdotas y ensayos en heladerías o boliches como María María, reconstruyen los orígenes de la banda como si fuera la historia de una serie épica que aún se sigue filmando. “Nos conocimos… y esta es la historia que nadie sabe: nos pusimos cuatro años de novios con Gaby. Es hora de blanquearlo… Bah, en Córdoba se resabe”, se ríe Lula.
