La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, prestó su testimonio este martes ante la Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados que investiga a la Corte Suprema y aseguró que el fallo "Muiña" representó un golpe demoledor para quienes llevan más de 45 años buscando verdad y justicia, ya que los magistrados "fallaron favoreciendo a los responsables de los crímenes más atroces de nuestra historia".
Carlotto aseguró que "las cosas comenzaron a cambiar a fines de 2015", con "la escandalosa irrupción de Carlos Rosenkrantz y Horacio Rosatti al Tribunal Supremo a través del decreto 83/15 firmado por el entonces presidente, Mauricio Macri".
En referencia al fallo "Fontevecchia”, de febrero de 2017, señaló que "la Corte determinó que no estaba obligada convencionalmente a acatar las sentencias contenciosas de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, contraviniendo obligaciones internacionales asumidas por el Estado Argentino, y su propia jurisprudencia".
Luego, en abril de 2017, llegó el fallo “Alespeiti”, por el cual se le concedió la prisión domiciliaria al ex militar Felipe Jorge Alespeiti, quien ya había sido condenado a 22 años de prisión, recordó.
Dos semanas después, el 3 de mayo de 2017, tuvo lugar "ese intento de golpe a la lucha de víctimas, familiares y organismo de derechos humanos: el fallo Muiña", repasó la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo.
"Todos recordamos lo que significaba ese fallo, abriéndole la puerta de la libertad a los genocidas, a los pocos que estaban en cárceles comunes como a aquellos que gozaban de la prisión domiciliaria", sostuvo De Carlotto.
Ese fallo pretendió aplicarle una conmutación acelerada de la pena a represores de la última dictadura militar, tomando como caso para sentar jurisprudencia a Luis Muiña, un torturador del centro clandestino "El Chalet" que funcionó en el predio del Hospital Posadas.
En ese sentido, señaló el "cinismo" por parte de Rosatti, Rosenkrantz y Highton ya que entre otros argumentos mencionaron el "retraso en la tramitación de las causas, ya sea de los juicios en curso como de las instancias recursivas pendientes en todas las instancias judiciales de las cuales la propia Corte es cúspide".
En el fallo “Muiña”, con la aplicación de la ley 2x1, "esbozaron un estándar general y de esta manera los ministros Rosatti, Rosenkrantz y Highton fallaron favoreciendo indiscriminadamente y de manera generalizada a los responsables de los crímenes más atroces que recuerde nuestra historia, a sabiendas que la doctrina y jurisprudencia aplicable de la propia Corte Suprema de Justicia de la Nación indicaban lo contrario", remarcó de Carlotto.
Por último, denunció la "lentitud en la tramitación de las causas que ya tienen sentencia pero que no aún esperan la confirmación de la Corte para adquirir firmeza" y la inactividad de la Comisión Interpoderes, entre otras irregularidades.
DECLARACIÓN DEL EX MINISTRO DE CAMBIEMOS
El ex ministro de Justicia durante el gobierno de Mauricio Macri, Germán Garavano, declaró esta tarde en la comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados por una sospechosa participación suya en "la compra" del voto de la ex suprema Elena Highton de Nolasco en el fallo del 2x1 de mayo de 2017.
En referencia al fallo Muiña, Garavano aseguró que la gestión respetó el fallo porque se respaldó en las “doctrinas Fayt y Petracchi”.
“Pedimos una prórroga; trabajamos mucho tiempo en la elaboración de un proyecto para que no se dictara el fallo de la Corte; ese proyecto logró unanimidad de todos los actores del sistema de justicia; fue presentado y nunca se trató”, indicó.
Garavano recordó que fue "falsamente denunciado" en sede penal por muchos temas que se abordan en la Comisión y, citando el artículo 18 de la Constitución Nacional, dijo que eso lo pone "en una situación difícil" a la hora de prestar testimonio. Es por eso que en sus respuestas abundaron los "no lo sé", "no lo recuerdo", "desconozco", "no era mi responsabilidad", entre otras excusas.
El ex ministro de Justicia reconoció que tuvo y aún conserva un lazo estrecho con el asesor económico y judicial del macrismo, Fabián "Pepín" Rodríguez Simón, quien se encuentra prófugo en Uruguay.
Garavano remarcó que uno de los momentos de mayor relación fue "con la designación de los jueces Rosenkrantz y Rosatti", aunque descartó haber hablado sobre el fallo Muiña.
"Hubo miles de adhesiones y algunas impugnaciones, con lo cual se dio un proceso muy democrático que finalizó con los envíos de los pliegos al Senado y que, luego de las audiencias públicas, otorgó con dos tercios el acuerdo para la designación de estos dos prestigiosos jueces", admitió.
Garavano negó haberse reunido con el testigo protegido Leonardo Fariña, quién testificó contra funcionarios del kirchnerismo en causas por corrupción.
