La IGJ (Inspección General de Justicia) comprobó irregularidades en el armado financiero de Macri. Encontraron una serie de maniobras fraudulentas con la justicia comercial de la Ciudad de Buenos Aires y se calcularon que aproximadamente, a dinero de hoy, unos 1.092.254 dólares que el ex mandatario habría sumado a su cuenta.
En enero del 2020 el titular de la institución comenzó a investigar lo que Mauricio Macri llamo como "Fideicomiso Ciego de Administración". Esto sirvió para que las firmas a cargo del ex presidente puedan maniobrarse dentro de la ilegalidad.
Algunas de estas empresas funcionaban como las elegidas por el estado en las licitaciones tanto a nivel nacional como provincial o municipal. Dentro de los nombres detrás de estas firmas aparecen personas del entorno de los funcionarios del macrismo desde el primo segundo de Marcos Peña hasta la esposa de Macri, Juliana Awada.
Este "fideicomiso ciego" funcionaba para transparentar el patrimonio de Mauricio mientras fuera presidente. Sin embargo esta figura no presenta caracter legal. Cuando Ricardo Nissen, a cargo de la Inspección General de la Nación comenzó a investigar este fideicomiso, descubrió todo.
Encubrimiento judicial
Con funcionarios de alto poder dentro de tribunales es todo más fácil. Aseguran que esta causa no avanzará y quedará en la nada como tantas otras y que el palacio de Tribunales se encuentra en igual estado que Comodoro Py, repletos de "amigos" del ex presidente donde no proceden las causas de los negocios fraudulentos de la familia.
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Por ejemplo, en los peajes la administración de Juntos por el Cambio benefició a Autopistas del Sol, sin haber ninguna licitación de por medio. De la misma, Macri era accionista. Lo mismo pasó con los parques eólicos, donde el gobierno permitió que Isolux, una empresa española quebrada se quedara al mando de la obra. Cuando se dieron cuenta que no podían continuar, se la cedieron al Grupo Macri.
