El ex presidente Mauricio Macri, volvió a la escena política para dejar en claro su portura respecto de algún desdoblamiento que intente la Ciudad de Buenos Aires, de la elección presidencial respecto de la de jefe de Gobierno de la Ciudad.
El planteo de Horacio Rodríguez Larreta, corre por ese camino: en primer lugar corrió el rumor de un desdoblemiento con respecto a la elección presidencial, es decir, una votación a jefe de gobierno y legisladores en dos fechas distintas. Esto fue descartado rápidamentre, sin embargo aún queda una opción posible de la que no se despega Larreta: la concurrencia.
Es decir, las elecciones en la misma fecha pero con listas de PASO separadas, por un lado habría mesas con boletas correspondientes a la elección nacional, y por el otro mesas con los candidatos exclusivamente de la Ciudad, lo que podría ser en un mismo cuarto oscuro o no.
La oposición de Mauricio Macri al planteo de la Ciudad
Sobre esto se expresó esta mañana Mauricio Macri, firme opositor a dicha idea por las implicancias que acarrea este planteo. "No creo que Horacio haga eso, sería ir en contra de los vecinos. Es más gasto del Estado, más tiempo de votación, más filas; sería ir en contra de todo lo que estuvimos trabajando estos años”, sostuvo Macri en delcaraciones radiales.
Pero no todo quedó allí, el ex presidente reforzó sus declaraciones con una serie de expresiones en las redes sociales: "Me consultaron hoy sobre la posibilidad de desdoblar las elecciones en CABA. Claramente representa más gasto del Estado, más filas, más tiempo, dos urnas y boletas y hasta podría darse la insólita situación de personas que tengan que votar en aulas y escuelas distintas".
"Que la política piense que por cambiar las reglas electorales en un año electoral los porteños van a elegir en un sentido determinado, es no conocerlos. Los porteños son autónomos, son libres y son independientes. Eligen a quien ellos quieren votar y a quien mejor los representa", remarcó el mandatario.
"No cambiar las reglas electorales en un año electoral es un valor de JxC. La mayoría del PRO está en desacuerdo: hacerlo sería ir en contra de lo que hemos hecho. No podemos complicar la vida de la gente, perjudicarlos y malgastar su plata por especulaciones o maniobras", agregó Macri.
Por último, agregó: "Los argentinos estamos cada vez más claros y decididos a favor de un cambio y con menos paciencia para atropellos y abandonos. Tenemos que ser respetuosos, no complicarles la vida y no estar cambiando las reglas creyendo que de esa manera se los va a manipular en algo".
El olvido selectivo de Macri
Macri, en su supuesto apego a las "normas electorales", olvida que en el año 2015, año en que era jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, desdobló las elecciones de la Ciudad respecto de las nacionales.
Fueron varios meses de campaña; el 26 de abril fueron las PASO de todos los partidos de la Ciudad, en donde Larreta se impuso. Luego fueron las generales de la Ciudad, el 5 de julio, allí nuevamente ganó Larreta, por sobre Martín Lousteau, del espacio ECO, y Mariano Recalde del FPV.
Pero ley electoral de la Ciudad dice que para ser elegido jefe de gobierno, el candidato debe obtener mayoría absoluta, que Larreta no había alcanzado, por lo que tuvo que dirimir el ballotage con Martín Lousteau el 19 de julio.
Años dorados en donde aparentemente no importaba el gasto multimillonario, y el trastorno que significa una campaña electoral de tantas semanas, faltando apenas un mes para volver al ruedo electoral, con las PASO nacionales que se realizaron ese mismo año en Agosto, en donde competían el propio Mauricio Macri, Daniel Scioli por el FPV, y Sergio Massa por el Frente Renovador.
En octubre fue la elección general, y en noviembre hubo ballotage, ya que ninguno de los candidatos había alcanzado los resultados mínimos estipulados por la ley electoral de porcentaje total o diferencia con el segundo candidato.
Fueron 6 oportunidades en que los porteños acudieron a las urnas, 6 veces en donde el aparato político tuvo que ponerse en marcha, para cubrir mesas, fiscales, etc. un verdadero derroche presupuestario.
