El diputado nacional Eduardo Valdés (Unión por la Patria) presentó un proyecto de ley para garantizar la continuidad del Instituto Nacional Juan Domingo Perón de Estudios e Investigaciones Históricas, Sociales y Políticas, cuya disolución fue anunciada por el vocero presidencial el pasado 7 de mayo, día en que se conmemoró el nacimiento de Eva Perón.
“La decisión de cerrar el Instituto Perón es un intento de borrar parte de nuestra identidad y un acto más de una política sistemática de persecución ideológica. Por eso propongo que su existencia quede garantizada por ley”, afirmó Valdés al fundamentar su iniciativa.
El proyecto propone dotar al Instituto de rango legal, autarquía y sede permanente en el edificio de la calle Austria 2593, en la ciudad de Buenos Aires, declarado monumento histórico nacional. También contempla la absorción de su personal, el resguardo de su patrimonio documental y una redefinición de su misión como institución pública dedicada a la investigación y difusión de la vida y obra de Juan Domingo Perón.
Riesgos patrimoniales y simbólicos
Valdés advirtió sobre el estado de incertidumbre que atraviesa el organismo desde el anuncio oficial: “El Instituto Perón resguarda un acervo documental de enorme valor histórico. En este limbo administrativo que generó el anuncio, sin decreto y sin traspasos formales, ese material puede ser saqueado o destruido. Hay que protegerlo”.
En los fundamentos del proyecto, el legislador destacó la carga simbólica de la sede actual: “En ese espacio se conjugan el amor y el odio. Allí vivieron Juan y Eva Perón. Allí nació un amor personal y colectivo por el pueblo. Pero también fue bombardeado en 1955 por quienes nunca toleraron que el amor sea motor de la política”.
La propuesta se alinea con los reclamos de diversos sectores sindicales y culturales, que han expresado su preocupación por el cierre del organismo.
Defensa de los trabajadores y del acceso público
El diputado también enfatizó la necesidad de preservar los puestos de trabajo: “No es mano de obra ociosa. Son compañeras y compañeros que han dedicado su vida a cuidar nuestra memoria. Hay que reconocerlos, no estigmatizarlos”.
Asimismo, defendió el rol del Instituto como un espacio académico abierto y plural: “Allí se forman investigadores, se editan libros, se estudia la historia del peronismo con rigor académico. Es un centro abierto a todos los que quieran entender la vida política argentina, no solo a los peronistas”.
El Instituto fue creado originalmente por decreto en 1995 y su sede fue declarada monumento nacional por ley en 2008. En este contexto, Valdés subrayó la necesidad de consagrar su existencia por ley para evitar que decisiones administrativas lo pongan en riesgo en el futuro. “Protegerlo por ley es saldar una deuda. Lo que está en juego no es solo un edificio o un presupuesto. Es nuestra historia, nuestra memoria y el derecho de las futuras generaciones a conocerla”, concluyó.
La iniciativa cuenta con el respaldo de varios legisladores de Unión por la Patria, entre ellos Ricardo Herrera, Ana María Ianni, Martin Aveiro, Victoria Tolosa Paz, Lorena Pokoik, Ernesto Ali, Gabriela Pedrali, Varinia Marin, Liliana Paponet, Silvana Ginocchio, Santiago Cafiero, Carlos Cisneros, Jorge Romero, María Eugenia Alianello y Diego Giuliano.