Tras un intenso operativo de búsqueda que se prolongó durante varios días, la Policía de la provincia de Buenos Aires confirmó la captura de Naiara, la joven de 16 años imputada por el homicidio de su pareja, Santiago López Monte, en la localidad de Remedios de Escalada. Fue localizada en el domicilio de un tío.
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Informes preliminares de las autoridades señalan que la adolescente, identificada únicamente como Naiara, se había teñido el cabello de rubio en un intento de evadir la acción de los investigadores.
La detención fue confirmada esta mañana por la cuenta de X INFORBANO: “Fue detenida la adolescente acusada de asesinar a puñaladas a Santiago López Monte, su novio en Remedios de Escalada”.
Sobre los últimos detalles del caso, agregaron: “Estaba escondida en la casa de su tío y fue localizada hoy por la Policía, que continúa investigando el crimen”.
La propia autora confesa del hecho había notificado a la madre de Santiago mediante una llamada, avisándole que lo había apuñalado. Según la versión de la joven, la agresión se habría producido porque la víctima intentó escalar una reja para atacarla; no obstante, esta versión fue desestimada por los peritos del caso.
El relato de la hermana de la víctima sobre la relación violenta
En una entrevista concedida a Radio Mitre, Macarena, hermana de Santiago López Monte, ofreció un dramático testimonio sobre la dinámica de la pareja. Describió la relación como "tóxica": “Ella era tóxica, no lo dejaba a mi hermano estar con su familia. Le molestaba porque, claramente, no tenía ese tipo de relación con su familia”.
En medio del dolor, la joven relató los abusos verbales: "Le decía que era una ‘mariquita’, una ‘pollerita de mamá’, pero no era así”. Además, los vecinos aportaron información crucial: “Los vecinos nos contaron que ella le pegaba y le sacaba la llave de la moto. Él se quedaba en la esquina por horas, hasta que ella se decidía a abrirle la puerta”, añadió.
Macarena expresó la perplejidad de su familia ante la incapacidad de Santiago para poner fin a la convivencia: “Él no quería volver. No sabemos si estaba amenazado o muy enamorado, no lo sabemos”. Finalmente, recordó las señales de alerta física que padecía su hermano: “Cuando venía acá siempre estaba rasguñado, golpeado. Una vez vino con la mano cortada y mi mamá le dijo ‘eso es una puñalada’”, concluyó.
