El mal clima volvió a complicar la rutina este jueves en varios puntos del Área Metropolitana de Buenos Aires.
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Las lluvias intensas y la caída de granizo provocaron cortes de luz que afectaron a más de 56 mil usuarios, según informaron las empresas distribuidoras.
Las zonas más afectadas fueron del sur del conurbano, especialmente en Lomas de Zamora y Quilmes, donde muchos vecinos reportaron quedarse sin servicio durante la tarde.
En la Ciudad, los principales cortes se dieron en Villa Lugano y Vélez Sarsfield.
Jueves complicado: cortes de luz y tormentas en la Ciudad y el conurbano
Edesur fue la empresa con mayor cantidad de interrupciones: casi 50 mil usuarios sin suministro. En el caso de Edenor, el número se acercó a los 7 mil.
En paralelo, el Servicio Meteorológico Nacional mantiene vigente una alerta amarilla por tormentas fuertes en la región, con probabilidad de granizo, lluvias intensas y ráfagas de viento.
La demanda de electricidad también se sintió: CAMMESA informó un pico de consumo de casi 16 mil megavatios alrededor de las 17.20.
Con el mal tiempo todavía presente, muchos esperan que el servicio se normalice lo antes posible.
Violento granizo y tormentas severas sacudieron a la Ciudad y la Provincia este Jueves Santo
Este Jueves Santo llegó con el mal tiempo que había anticipado el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), y trajo consigo un panorama gris y cargado desde las primeras horas del día.
Desde temprano regía una alerta amarilla por tormentas fuertes y posibles caídas de granizo en varias zonas del país, incluyendo la Ciudad y la provincia de Buenos Aires. Y en horas de la tarde, ese pronóstico se cumplió con creces.
Cerca de las 17, distintos barrios del Área Metropolitana de Buenos Aires se vieron afectados por una intensa granizada, que duró pocos minutos pero fue lo suficientemente fuerte como para dejar las calles cubiertas de hielo.
Fuerte temporal con lluvias y granizo en varias zonas del país
Las piedras de granizo sorprendieron por su tamaño y por la velocidad con la que impactaron. En algunas zonas, los vecinos escucharon el estruendo en los techos y ventanas, y muchos autos sufrieron daños.
La tormenta también estuvo acompañada por lluvias intensas, ráfagas de viento y actividad eléctrica. Además de la Ciudad y el Gran Buenos Aires, la alerta del SMN se extendió al norte de la provincia de Buenos Aires y al sur de Santa Fe y Córdoba.
Según el organismo, se esperaban precipitaciones acumuladas de entre 30 y 50 milímetros en cortos períodos de tiempo.
Aunque no se reportaron incidentes graves ni evacuaciones, la granizada generó complicaciones en el tránsito, cortes momentáneos de luz en algunas zonas y preocupación entre los vecinos, especialmente por el tamaño de las piedras.
Con el paso de los minutos, la intensidad de la lluvia fue disminuyendo en algunas zonas, pero el clima seguirá inestable y con posibilidad de lluvias hasta la noche.
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