René Bertrand, actor y director de teatro con una larga trayectoria en la escena local, falleció este jueves a los 53 años en un sanatorio porteño.
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La noticia fue confirmada por allegados y amigos del artista, entre ellos el periodista Fede Flowers, quien dio a conocer la información en redes sociales luego de hablar con su madre, la actriz María Rosa Fugazot.
Aunque no se dieron talles oficiales sobre las causas, se supo que Bertrand atravesaba una enfermedad desde hacía tiempo y que en las últimas horas su estado de salud se agravó a raíz de un virus que habría afectado su organismo debilitado.
Dolor en el teatro y la TV: falleció René Bertrand
Hijo de una familia ligada al arte, Bertrand respiraba teatro desde la cuna. Fue hijo del actor César Bertrand y de la reconocida actriz María Rosa Fugazot.
Además, también fue nieto de la actriz María Esther Gamas y del músico Roberto Fugazot, y ahijado artístico de Alberto Olmedo, quien fue gran amigo de su padre.
Inició su carrera a fines de los años ’80, luego de formarse en el Conservatorio Nacional de Arte Dramático.
En televisión participó en recordados ciclos de los años ’90 como Amigos son los amigos, Brigada Cola, El gordo y el flaco, Los Benvenutto y Chiquititas, entre muchos otros. También dejó su huella en Alta comedia, Son de diez, Chance, y Regalo del cielo.
En teatro tuvo una actividad intensa, tanto arriba como abajo del escenario. Debutó con El que me toca es un chancho y más tarde protagonizó y dirigió clásicos de la comedia porteña como El champán las pone mimosas.
A lo largo de su carrera dirigió decenas de obras, entre ellas Venecia, 14 millones, Una familia poco normal y Tu cola me suena.
Estuvo muy ligado a las producciones de los Sofovich, especialmente en La peluquería de Don Mateo y Polémica en el bar.
Con el tiempo, se volcó cada vez más a la dirección, armando elencos, escribiendo guiones y llevando sus propias ideas al escenario.
Bertrand estaba casado con la actriz Belén Giménez y era padre de dos hijos: Sofía y Franco. El ambiente artístico lo despide con tristeza y cariño, recordándolo como un tipo apasionado por el teatro, trabajador incansable y muy querido por sus compañeros.
