Lionel Scaloni, junto a Pablo Aimar, Walter Samuel y Roberto Ayala —emblemas del cuerpo técnico que llevó a Argentina a lo más alto del fútbol mundial— se animó a un desafío distinto: el Desafío Río Pinto, una de las carreras de mountain bike más prestigiosas de Latinoamérica.
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El evento se disputó en el valle de Punilla, Córdoba, y reunió a cientos de ciclistas, pero fueron los campeones del mundo quienes acapararon todas las miradas. Scaloni, un apasionado del ciclismo, se lanzó a cubrir los 85 kilómetros del recorrido serrano y cruzó la meta completamente embarrado, sonriente y con la satisfacción de haber cumplido el reto. Finalizó en el puesto 22 de 98 participantes en la categoría “Profesional masculina”, con un tiempo de 3 horas, 13 minutos y 33 segundos.
Pero Scaloni no estuvo solo: lo acompañaron Aimar, Samuel, Ayala, y otros integrantes de la Albiceleste como Matías Manna, Luis Martín y Martín Tocalli. Samuel y Aimar cruzaron la meta casi al unísono (puestos 63° y 64°, en 4 horas, 12 minutos y 31 segundos), mientras que Ayala completó la prueba en el puesto 98° tras más de seis horas de esfuerzo. Martín, Manna y Tocalli no registraron tiempo oficial, pero también formaron parte de la aventura.
El Desafío Río Pinto no es cualquier competencia: arranca y termina en el Aero Club de La Cumbre, atraviesa caminos de ripio, duras subidas y paisajes imponentes, poniendo a prueba no solo la resistencia física, sino también la estrategia y determinación de cada participante.
Scaloni, antes de largar, cantó el Himno Argentino junto a los presentes y dejó un mensaje sencillo pero potente: “Vamos a disfrutar de la carrera. Gracias por la invitación”. Su vínculo con el ciclismo no es nuevo; él mismo contó que desde que dejó el fútbol se convirtió en un apasionado de la bicicleta, sobre todo de montaña, rodando casi todos los días.
Así, el cuerpo técnico que llenó de alegría a todo un país demostró que, más allá del césped, sigue unido y con hambre de nuevos desafíos. Porque la Scaloneta, ya sea con pelota o con bicicleta, no se detiene.
