Julieta Prandi salió al cruce de Nicolás Márquez, biógrafo de Javier Milei, luego de que este pusiera en duda la denuncia por la que su exmarido, Claudio Contardi, fue condenado a 19 años de prisión.
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La modelo y conductora no dejó pasar los dichos del escritor y lo calificó como “misógino” y “violento”, acusándolo de hablar “desde la ignorancia total” sobre un caso que ya tuvo sentencia firme.
En diálogo con los medios, fue tajante: “Me provoca asco”.
Dura respuesta de Prandi a Nicolás Márquez: “Ignorante y violento”
La actriz, que durante años llevó adelante un duro y extenso proceso judicial para probar los abusos y el calvario que sufrió junto a sus hijos, remarcó que los dichos de Márquez son parte de un patrón que muchas víctimas enfrentan
Prandi contó que “lo poco que leí me espantó” y cuestionó que Márquez “se meta con una víctima de violencia de género” sin conocer en profundidad el caso.
Las palabras de la conductora se sumaron a la ola de repudios que recibió el escritor en redes sociales por sus expresiones sobre una causa que ya cuenta con sentencia judicial.
Qué dijo Sebastián Ortega, actual pareja de Julieta Prandi, sobre los dichos de Márquez
En un mensaje publicado en sus redes sociales, el músico no dejó pasar las declaraciones del polémico autor, que antes de conocerse la sentencia había relativizado la violencia denunciada y responsabilizado a la propia víctima. “Lo invito a que se llame a silencio”, expresó Ortega, visiblemente indignado.
El artista criticó duramente el tono y el contenido de las reflexiones de Márquez, a las que calificó como “retrógradas, machistas y repugnantes”.
Además, señaló que sus palabras revelan un “enanismo intelectual” y aseguró que lo primero que le generaron fue lástima.
Sin medias tintas, Ortega admitió que lo segundo que sintió fue “ganas de cagarlo a trompadas”, no sólo por involucrarse con su pareja, sino por atacar a “una víctima de las peores aberraciones que una mujer pueda soportar”.
El músico cerró su mensaje con una advertencia: “La vida nos da la posibilidad de elegir una y otra vez. La próxima vez que elija abrir la boca, piénselo mejor. Y si no le da para pensar, simplemente no diga nada”.
