Los Grobo, uno de los grupos empresariales más emblemáticos de la moderna agroindustria argentina, se encuentra en graves problemas económicos. De acuerdo a los datos del Banco Central (BCRA), entre el 2 y el 6 de este mes, Los Grobo Agropecuaria S.A. registró 15 pagos de cheques rechazados por $1376 millones, mientras que Agrofina sumó otros tres por $950 millones entre el 2 y el 8 de enero, ambas empresas pertenecientes al grupo fundado por Gustavo Grobocopatel.
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En este sentido, la firma Surcos, también perteneciente al mismo entramado empresarial, cayó en default por US$500.000, informó ayer a la Comisión Nacional de Valores (CNV) que enfrenta un juicio con Finlatina SA y un embargo por más de $21 millones.
El grupo es controlado en un 90% por el fondo de inversión Victoria Capital Partners (VCP), mientras que el 10% restante pertenece a Gustavo Grobocopatel y su hermana Matilde.
Esta situación financiera comenzó a ver la luz, el 27 de diciembre pasado, cuando Los Grobo Agropecuaria y Agrofina, ambas empresas del grupo Los Grobo, notificaron a la CNV que dejarían de pagar pagarés por un total de US$10 millones hasta el 31 de marzo de 2025.
Por esta serie de situaciones, la agencia FIX (afiliada a Fitch Ratings) redujo la calificación crediticia de Los Grobo Agropecuaria (LGA) de BBB(arg) a C (arg). “Esto responde al anuncio de que la compañía no cumplirá con sus compromisos financieros”, explicó FIX en su informe.
En este sentido, agregó que a noviembre de 2024, la deuda consolidada del grupo ascendía a US$207 millones, con vencimientos de corto plazo por US$52 millones. FIX subrayó que “el saldo de caja e inversiones corrientes consolidado era de US$15 millones, sumado a inventarios de rápida realización por USD 65 millones”, pero advirtió que un incumplimiento efectivo podría llevar la calificación a D(arg).
Agrofina explicó que su incumplimiento se debió a “una retracción significativa en las ventas de agroinsumos, lo que afectó el flujo de fabricantes y distribuidores. Esto provocó una fuerte caída en el mercado de fitosanitarios, sumado a la acumulación de stocks en los canales de distribución”. También señaló que la falta de liquidez en el mercado de pagarés bursátiles les impidió cubrir un pagaré de $400 millones.
Por su parte, Surcos también tiene por delante un panorama sombrío. En una carta que fue enviada a la CNV, Sebastián Calvo, CEO de la compañía, informó que “se ha tomado conocimiento respecto de que se ha entablado en contra de la sociedad un juicio ejecutivo por la suma de $50.000.000 en el marco de los autos ‘FINLATINA SA C/ SURCOS SA S/ JUICIO EJECUTIVO’ (Expte. 21/02050723/0), radicado en el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial N° 3, Secretaría Única de Santa Fe”. Además, agregó que el mismo incluye un embargo por $21.666.666,66.
La firma, que había caído en default el pasado 28 de noviembre al incumplir el pago de un pagaré bursátil por US$500.000, explicó que este hecho está vinculado a la caída del mercado de fitosanitarios en 2023, que sufrió una baja superior al 30%. Además, el inicio de un plan de expansión internacional en noviembre, con una inversión de US$ 36 millones, afectó severamente el grupo de capitales.
