La suba de precios volvió a sentirse en las estaciones de servicio. En noviembre, la venta de combustibles cayó con fuerza y dejó en evidencia el impacto de los aumentos en un presupuesto familiar cada vez más ajustado.
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Según datos del sector, el consumo al público registró una baja interanual del 6,5% en comparación con el mismo mes del año pasado.
En total, se comercializaron 1.376.311 metros cúbicos, contra más de 1.472.000 de noviembre de 2024.
El retroceso fue todavía más marcado en el gasoil, que mostró una caída cercana al 19%, un dato que refleja la menor actividad del transporte y del sector productivo.
La baja del diésel Grado 2 fue la más pronunciada y terminó arrastrando el promedio general.
Con precios más altos, se vendió menos combustible en noviembre: los detalles
En la comparación mensual también se observó una retracción. Frente a octubre, la demanda bajó 1,67%, aun teniendo en cuenta que noviembre tuvo un día menos, lo que confirma una tendencia a la baja que se viene repitiendo.
Las naftas premium, en cambio, se mantuvieron prácticamente estables. La nafta de mayor octanaje tuvo una leve suba interanual, mientras que el gasoil premium mostró una variación mínima.
Distinto fue el caso de la nafta súper, que cayó más del 3%, afectada por el menor consumo cotidiano.
El impacto no fue parejo en todo el país. Las mayores caídas se registraron en Córdoba, Santa Cruz y Jujuy, donde la venta de combustibles retrocedió con fuerza respecto del año pasado.
En cuanto a las empresas, casi todas cerraron noviembre con números en baja. La única excepción fue Gulf, que logró crecer, mientras que el resto de las compañías vendió menos litros que en 2024.
