La Sala Penal Especial de la Corte Suprema de Perú condenó al expresidente Pedro Castillo por el delito de conspiración para la rebelión y le impuso 11 años, 5 meses y 15 días de prisión por el golpe de Estado.
La sentencia se relaciona con los hechos ocurridos en diciembre de 2022, cuando Castillo intentó disolver inconstitucionalmente el Congreso, un intento fallido que desencadenó su inmediata destitución y arresto.
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El panel especial del alto tribunal también impuso al exmandatario, de 56 años, una inhabilitación para ejercer cargos públicos por el término de dos años. Castillo permanece detenido desde el día de su arresto.
La sentencia condenatoria se extendió a dos exministros del gabinete de Castillo por el mismo delito. Una de las figuras condenadas es la exprimera ministra Betssy Chávez. Su situación presenta una complejidad diplomática, dado que se encuentra actualmente asilada dentro de la Embajada de México en Lima, país con el cual el Gobierno peruano rompió relaciones diplomáticas a raíz del asilo otorgado. Tanto Castillo como sus exministros tienen la posibilidad de apelar el fallo emitido por la Corte Suprema.
Cabe precisar que se trata de una sentencia en mayoría, con los votos de los jueces supremos José Neyra Flores y Norma Carbajal Chávez. El juez supremo Iván Guerrero López tuvo un voto en discordia.
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¿Por qué fue condenado Pedro Castillo?
Castillo era juzgado desde marzo por haber anunciado el 7 de diciembre de 2022 la disolución del Congreso, la instauración de un gobierno de excepción y la intervención del Poder Judicial, lo que fue calificado por la Fiscalía como un intento de quiebre del orden constitucional.
Con el cierre del Parlamento Castillo intentaba evitar una votación que buscaba su remoción por “incapacidad moral permanente”.
Ese mismo día el entonces mandatario fue detenido por la Policía tras salir del Palacio de Gobierno cuando se dirigía con su familia hacia la embajada de México, según la reconstrucción de los hechos recogida en el expediente judicial. Inmediatamente el Congreso lo destituyó.
Castillo ya había sobrevivido a otros dos intentos previos de remoción. Apenas estuvo 16 meses en el gobierno y modificó cinco veces su gabinete con más de 60 cambios de secretarios, lo que provocó una parálisis interna.
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Las condenas contra ex presidentes en Perú
Este fallo contra Castillo marca la segunda condena a un expresidente peruano en la misma semana, evidenciando la profunda crisis política y judicial que atraviesa el país andino. El miércoles, un tribunal diferente había condenado al también exmandatario Martín Vizcarra a una pena de 14 años de cárcel por haber sido encontrado culpable de recibir sobornos durante su ejercicio como gobernador de una región del sur antes de asumir la presidencia.
Cabe recordar que, tras la destitución y detención de Castillo en 2022, fue sucedido por su vicepresidenta, Dina Boluarte. Sin embargo, la inestabilidad política continuó, y Boluarte también fue destituida en octubre, en medio de un gobierno profundamente impopular y el aumento de la inseguridad y la criminalidad en la nación. El actual presidente de Perú es José Jerí, quien anteriormente se desempeñaba como titular del Congreso.