Mientras Javier Milei anunciaba el Presupuesto 2026 en cadena nacional, miles de personas eligieron salir a manifestarse en de la Ciudad de Buenos Aires en contra de los recortes en educación, salud y los vetos presidenciales a leyes aprobadas por el Congreso.
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Los cacerolazos y ruidazos se escucharon en varios barrios de la ciudad, especialmente en zonas como Lugano, San Telmo, Caballito y Balvanera.
La protesta, que se viralizó rápidamente a través de redes sociales, no fue convocada por partidos ni agrupaciones sociales, sino que nace de un malestar generalizado ante los recortes del Gobierno.
Protesta masiva: cacerolazos durante la cadena nacional de Milei
Los manifestantes aseguran que los recortes presupuestarios afectan directamente a los sectores más vulnerables, especialmente la educación pública y la salud.
En sus denuncias, señalan que el gobierno está priorizando el equilibrio fiscal sobre la inversión social, lo que consideran un golpe directo a los derechos de los ciudadanos.
En redes sociales, muchos expresaron su repudio utilizando hashtags como #Cacerolazo y #FueraMilei.
A pesar de que la manifestación fue espontánea y autoconvocada, se perfila como una antesala de lo que se viene en la tercera Marcha Federal contra el gobierno de Milei.
La movilización, que se está organizando principalmente a través de la comunidad universitaria y trabajadores del Hospital Garrahan, rechaza las recientes medidas del gobierno, como el veto a la ley de financiamiento universitario y la ley de emergencia pediátrica, que perjudican a la educación y la salud públicas.
Durante su discurso en cadena nacional, Javier Milei destacó que el eje central de su gestión es el equilibrio fiscal, al cual calificó como "la única forma de que Argentina salga del ciclo del desencanto".
"Los argentinos son los protagonistas de este proceso", aseguró el presidente, agradeciendo el supuesto apoyo popular y subrayó avances en términos de estabilidad económica.
Javier Milei presentó el Presupuesto 2026: "El equilibrio fiscal es la piedra angular de nuestro plan de Gobierno"
En una cadena nacional marcada por la insistencia en el equilibrio fiscal, Javier Milei presentó este lunes el Presupuesto 2026, un documento que reitera su apuesta por la austeridad y el ajuste.
A las 21 horas, en un mensaje grabado en el Salón Blanco de la Casa Rosada, el presidente dejó claro que, a pesar de los reveses electorales y las crecientes tensiones sociales, el rumbo económico no cambiará.
“Lo peor ya pasó, y por eso quiero agradecerles por el enorme apoyo que han demostrado a lo largo de este primer periodo. Ustedes son los protagonistas de este proceso, ustedes son quienes han emprendido el arduo camino de crecer y abrazar las ideas de la libertad”, comenzó Milei.
El futuro del ajuste: Milei presentó el Presupuesto 2026 con nuevas reformas
El núcleo del discurso de Milei fue el mismo que viene repitiendo desde su llegada al poder: el déficit fiscal no es negociable. “Cuando yo digo que el rumbo está fijado en piedra y que el equilibrio fiscal no se negocia, no lo digo por capricho o preferencia personal, lo digo porque hacer lo que estamos haciendo es el único camino para que la Argentina salga de forma definitiva del ciclo del desencanto consecutivo en que vivimos hace décadas". afirmó.
Así, recordó que los intentos previos de financiar el déficit con emisión monetaria o deuda fueron fracasos rotundos que solo llevaron a la inflación y al estancamiento económico. “El camino del déficit fiscal financiado con deuda ya se probó y nos llevó a heredar una deuda pública de quinientos mil millones de dólares. Y la historia nos mostró como defolteadores seriales, motivo por el cual los mercados nos castigan”
Entre los anuncios más destacados, el mandatario reveló que para el próximo año se destinarán 4,8 billones de pesos a las universidades nacionales, una cifra que forma parte de un aumento generalizado en varias partidas clave.
Además, anunció que los jubilados recibirán un aumento del 5% por encima de la inflación, lo que se suma a una serie de incrementos en sectores sociales y económicos “Este presupuesto otorga 4,8 billones a las universidades nacionales. Aumenta el gasto en jubilaciones un 5%, en salud un 17% y en educación un 8%, todas las partidas por encima de la inflación”, detalló Milei.
En este marco, también destacó que los aportes por discapacidad subirán un 5% adicional por encima de la inflación. Señalo que más allá de los recortes y ajustes, "la prioridad del Gobierno es el Capital Humano".
El Presidente también enfatizó que el presupuesto se encuentra "limitado por restricciones de financiamiento", e indicó que prohíbe que el Tesoro se financie a través del Banco Central: “También presenta una regla de estabilidad fiscal: si los ingresos caen o superan lo previsto, se deberán ajustar partidas para mantener el equilibrio fiscal”, explicó.
En su discurso, también habló del crecimiento económico que se lograría con un superávit fiscal sostenido. “Si el equilibrio fiscal le sumamos las reformas que queremos llevar adelante, podríamos estar hablando de un crecimiento del 7 y 8 % anual de manera sostenida. Crecer a esas tasas implicaría que en 10 años nos pareceríamos a países de altos ingresos”, se entusiasmó el presidente.
Además, se mostró optimista respecto a la capacidad del país para volver a ser competitivo a nivel global. “Crecer a esas tasas implicaría que en 10 años nos pareceríamos a países de altos ingresos, en 20 años estaríamos entre los países más ricos del mundo, y en 30 años estaríamos en el podio de las potencias mundiales”, aseveró.
En una medida inédita, también adelantó que el presupuesto incluirá un régimen de extinción de obligaciones recíprocas para “recomponer la relación entre el Estado y las provincias”, así como un plan para reactivar la economía basado en “más superávit primario, menos deuda y más inversión privada”.
Tras presentar los anuncios del Presupuesto del próximo año, Milei cerró su discurso con un mensaje reflexivo y enfático sobre el camino que sigue su Gobierno. Destacó la importancia de mantener el rumbo y de no desviar el curso de los cambios iniciados, a pesar de la crisis económicas y el desgaste social.
“Nos ha costado mucho llegar aquí. Todos hemos hecho enormes esfuerzos para salir del pozo en el que estábamos cuando asumimos. De hecho, los sueldos del poder ejecutivo están congelados desde la misma fecha en que hemos asumido. Sabemos que el camino es arduo, pero también sabemos que el rumbo es el correcto.”, sostuvo.
En un llamado a la unidad nacional y al esfuerzo conjunto, el presidente insistió en que es fundamental que el proceso de transformación que comenzó no se detenga. “Tenemos que entender como país y como sociedad que, si no terminamos el proceso de cambio que hemos emprendido, habremos tirado a la basura todo el esfuerzo que hemos hecho. No aflojemos, hagamos que todo este esfuerzo valga la pena.”
