A partir de ayer en la plataforma de HBO Max se puede disfrutar de "Seven: los siete pecados capitales", la icónica película de David Fincher protagonizada por Brad Pitt.
A lo largo de los años, el film solamente cosechó elogios y reseñas con puntajes casi perfectos. En los premios Oscar en 1995 se llevaron el premio a Mejor montaje y en los BAFTA a Mejor guión original.
La historia nos adentra en una serie de asesinatos que suceden en base a los pecados capitales mientras la persona que ejecuta este plan, va dejando pistas para que el cuerpo haciendo que el caso sea cada vez más macabro.
Brad Pitt confesó que atravesaba un momento oscuro cuando recibió el guion de la película: “Había tenido experiencias no tan buenas en algunos trabajos, y no estaba muy seguro de lo que estaba haciendo… Fue el momento más insano. Necesitaba desconectarme. Me despertaba, me daba una calada con el bong, tomaba cuatro Coca-Colas con hielo, sin comer nada. Ese verano me la pasé viendo el juicio de O.J. e intentando descubrir: ‘¿Qué hago ahora? ¿Qué hago después?’”
El punto de inflexión llegó gracias a su mánager y amiga, Cynthia Pett-Dante: “Entonces leí este guion. Mi querida amiga, mi mánager y básicamente mi hermana hoy, Cynthia, me lo mandó. Me dijo: ‘Tenés que leer esto.’”
Su primera reacción, sin embargo, fue de rechazo: “Leí las primeras siete páginas, la llamé y le dije: ‘¿Estás bromeando? ¿El cliché del viejo policía que quiere retirarse, el joven que entra y mira sus trofeos de fútbol del secundario?’ Y ella me dijo: ‘Terminá de leerlo.’”
Todo cambió cuando conoció a David Fincher: “Después fui a reunirme con Fincher, y hablaba del cine de una manera que jamás había escuchado a nadie. Me volvió la adicción. Encontrar eso… reavivó lo que yo quería de todo esto.”
Con humildad, Pitt reveló cómo vive hoy su vínculo con el oficio: “No siento que sea muy bueno en esto. Siempre me dio un poco de vergüenza este costado, y todavía lo siento cada vez… Prefiero hacer cosas, ya sea una silla, una camisa o una película, y que hablen por sí solas y seguir adelante.”
David Fincher: perfeccionismo, lluvia y una cabeza en la caja
Por su parte, David Fincher recordó que antes de recibir el guion de Seven, había vuelto al mundo de los comerciales y videoclips. “Me mandaron por accidente el guion de Seven. Y recordá, hay muy pocos guiones en esta industria que uno lee y dice: ‘¿Qué acaba de pasar?’”
En un principio, también fue escéptico: “Cuando lo recibí pensé: ¿Viejo policía/joven policía? No sé… Llamé a mi agente y le dije: ‘No me interesa esto de los últimos siete días de un investigador de homicidios.’ Y él me dijo: ‘Llegá al final.’ Así que volví a leerlo… No mucho. Quedaban menos de 20 minutos de película.” El giro final lo convenció por completo: “Y entonces llegué a la cabeza en la caja y fue como: Estoy dentro.”
Fincher explicó que nunca dudó de sí mismo, aunque aprendió a aceptar errores: “Nunca me faltó confianza, simplemente porque todos cometemos errores… Quiero creer en lo que estoy haciendo. Y con Seven finalmente tenía un material que expresaba eso. El tipo de película que yo quería ver. Me gustan las películas que me desafían, que me hacen decir: ‘¿En serio? ¿Querés llegar tan cerca?’”
Fincher convenció a New Line para terminar la película con una propuesta firme: “Recuerdo que al final de una reunión, me giré hacia Michael De Luca… Y le dije: ‘Esta película es buena… Necesito el dinero para terminarla, y vengo a decirte que si me apoyás, sé que puedo hacer una mejor película que la que mostramos en el test screening.’” A lo que De Luca respondió: “Bueno, esto es lo que vamos a hacer: Vas a seguir filmando… Seguí con lo que tengas que hacer. Yo firmo las órdenes de compra.”
Sobre la esencia del film, Fincher fue claro: “La idea era que te vendían un thriller, pero en realidad se convierte en una película de terror. Y con eso me refiero a que las películas de terror, en esencia, tratan sobre cosas que no podés controlar.” Con su clásica ironía, cerró con un comentario sobre la obsesión de algunos fans: “¿Tus fans solo quieren hablar de Seven con vos?… Los que realmente quieren hablar de eso probablemente estén en alguna lista de vigilancia.” “Dios, espero que sí. Siempre bromeábamos que para cuando Seven llegó a su quinta semana en cartel, si alguien estaba viendo la función matutina, había que ponerle las esposas.”