Amnistía Internacional publicó su informe anual y fue muy dura con el Gobierno de Javier Milei.
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Bajo el título “12 meses de gestión, 12 derechos perdidos”, la organización advirtió sobre un retroceso grave en libertades y condiciones de vida.
“La crítica molesta y el poder responde con violencia”, sentenciaron en un hilo publicado en "X".
Una de las principales alertas tiene que ver con la libertad de expresión. Amnistía denunció que “se desplegó una disputa contra todo aquel que piensa distinto”.
Amnistía denunció censura, ajuste y represión en el gobierno de Milei
La organización de derechos humanos arremetió contra el cierre de medios públicos, los discursos de odio desde el poder, la estigmatización de periodistas y el aumento de la censura. “El derecho a informar y ser informados, en riesgo”, aseguraron.
En cuanto a la protesta social, Amnistía señaló que el Gobierno criminaliza el disenso. Desde que rige el “protocolo antipiquetes” del Ministerio de Seguridad, más de 1.100 personas fueron heridas o detenidas.
“Protestar es un derecho, no un delito”, subrayaron. También cuestionaron el uso excesivo de balas de goma y gases lacrimógenos, además de las agresiones a periodistas durante las marchas. “El Estado no escucha: reprime”.
El informe también advierte por el impacto social del ajuste. En el caso de los jubilados, remarcan que cerca de 2,5 millones de personas mayores viven en la pobreza. “Su jubilación no alcanza ni para comer, tener un techo o comprar remedios”, advirtieron.
La pobreza, según datos oficiales, subió del 41,7% al 52,9%. “Más de 15 millones de personas están afectadas y un millón de chicos se va a dormir sin una cena diaria”, indicaron. También remarcan que las mujeres y los sectores populares son los más golpeados por las políticas económicas.
“Es urgente que el gobierno revierta este retroceso y ponga a las personas por delante de los objetivos fiscales”, reclamaron desde Amnistía Internacional.
Amnistía Internacional repudió la represión en la última marcha de jubilados: “Protestan porque quieren sobrevivir”
A través de un posteo en redes sociales, la organización denunció que se utilizó gas lacrimógeno y un “operativo desproporcionado” para desalojar la manifestación que se estaba dando de forma pacífica.
La protesta, como cada miércoles, reunió a personas mayores que reclaman por una mejora en sus haberes. En esta ocasión, tambien participaron estudiantes y gremios en apoyo.
Pero la jornada terminó con represión: al menos 13 personas resultaron heridas por el uso de gases, y dos manifestantes fueron detenidos.
Fuerte crítica de Amnistía por la represión a los jubilados en Congreso
“Viven con 355 mil pesos por mes. Protestan porque quieren sobrevivir. Y, otra vez, la respuesta del gobierno fueron gases irritantes y un operativo desproporcionado”, publicó la filial local del organismo internacional.
Amnistía remarcó que la mayoría de los afectados fueron jubilados y trabajadores de prensa. “No es un hecho aislado. Es una política de Estado para silenciar el reclamo y criminalizar la protesta”, aseguraron.
En medio del caos fue detenido Mariano Lamberchutti, uno de los asistentes a la marcha. Otras personas debieron ser atendidas en el lugar por efectos de los gases arrojados a corta distancia.
“Manifestarse por una vida digna no es delito”, concluyó Amnistía, que alertó sobre la gravedad de que el Estado responda con violencia ante reclamos por derechos básicos.
