Tras agotar su show del 30 de mayo en Niceto, la legendaria banda de rock nacional, Virus, vuelve a presentarse en Capital Federal.
El conjunto se presentará el 24 de julio en Niceto Club nuevamente para celebrar los 40 años de "Locura", disco clave para la música argentina.
Las entradas están a la venta en Niceto Tickets en este enlace a un precio de $37.000 sin cargo por servicio.
“No hay ninguna contradicción entre la justicia social y el hecho de querer estar bien”, explican los miembros actuales de Virus, reabriendo un debate que la propia banda inició décadas atrás y que hoy sigue vigente. ¿Es posible defender la justicia social y al mismo tiempo cantar al placer y al hedonismo? La respuesta de Virus es clara: “Son dos cosas que no se contradicen, se complementan, se necesitan.”
Una banda valiente en tiempos oscuros
“Las letras de Virus siempre tuvieron un componente de ironía, de doble sentido, de ambigüedad”, afirma Silvia Bordoni, periodista y estudiosa del rock nacional. Y añade: “Eso en un contexto de dictadura era muy valiente.” Virus no escribía canciones de protesta explícitas, pero sí letras que invitaban a pensar, a cuestionar, a ver más allá del sentido literal.
“Fue una banda que rompió esquemas, que se atrevió a hacer cosas diferentes”, destaca Bordoni. En medio de una escena marcada por la gravedad política y existencial, Virus propuso otra mirada, sin dejar de lado el compromiso: “Un pueblo oprimido, que no le dan un mango, no puede estar bien. No tiene cómo.”
La música como motor de vida
La visión artística de Virus nunca se separó de su experiencia vital. “Estoy viviendo la vida para la música y la música para la vida. Así que creo que es una retroalimentación”, reflexiona uno de los integrantes actuales. Para ellos, la creación no es algo impuesto ni artificial: “Lo que sí no hay es la intención de forzar que suceda. Tratamos de ser honestos con lo que nos pasa.”
“Todo lo que me pasa en la vida va a un tema”, afirman. De ahí que muchas de sus composiciones hayan surgido de lo cotidiano, casi de manera espontánea: “Fue un tema que nació de la nada”, recuerdan sobre uno de sus clásicos. “Un día estábamos en casa y Marcelo (Serra) estaba tocando una base. Julio se sumó con la guitarra y yo con la melodía. Así fue saliendo.”
Una obra que trasciende fronteras y generaciones
“La verdad es que nos sorprende a nosotros mismos la trascendencia que han tomado los temas de Virus a través del tiempo”, confiesan con humildad. Sin haberlo planeado, sus discos cruzaron fronteras: “Nuestros discos se escuchaban en radios de países donde nunca fuimos, como Suecia, Finlandia, Japón.”
“La obra trasciende”, dicen. Y ese impacto se ve hoy más que nunca, con nuevas generaciones que siguen descubriendo sus letras, su actitud, su estética. “Es una banda que trascendió épocas. Siguen siendo una referencia para muchos músicos.”
Un legado que se reinventa
Lejos de caer en la nostalgia, Virus sigue activo y con proyectos en marcha. “Ahora queremos ver cómo armamos un documental de esta historia”, revelan. “Será una ficción basada en la historia de la banda.” Además, están preparando un nuevo disco con el espíritu clásico de Virus pero con un sonido actual, gracias a la colaboración con productores jóvenes. “No queremos sonar viejos”, aclaran con convicción.
El motor sigue siendo el mismo: el deseo de vivir, de expresarse, de conectar. “A mí me gusta hacer discos, soy feliz. El trabajo es mi pasión”, dicen. Y frente a quienes alguna vez los acusaron de liviandad, responden con claridad: “La búsqueda de la felicidad es parte de una necesidad de sobrevivir y de seguir en este camino.”
Virus no niega el dolor: “En la vida hay momentos de dolor, de sacrificio... pero también hay momentos para el relax, para el placer, para el disfrute, para el amor, la sensualidad.” Y como dijeron en una de sus canciones más icónicas: “De lo malo, a lo bueno.”
