El proceso para seleccionar al sucesor del actual secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, quien dejará el cargo en enero de 2027, se inició formalmente. Para poner en marcha la elección del nuevo titular de la Asamblea General, se ha solicitado a los países miembros que presenten a sus aspirantes, haciendo un llamado particular para que se postulen candidatas. El diplomático argentino Rafael Grossi ya confirmó su intención de participar en esta contienda.
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Los quince miembros del Consejo de Seguridad, junto con la firma del propio Guterres, han extendido una invitación a los 193 países que integran la ONU para que presenten sus nominaciones.
En el comunicado, se resalta la necesidad de equidad: "Observando con pesar que ninguna mujer ha ocupado nunca el cargo de secretario general, y convencidos de la necesidad de garantizar la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres a la hora de acceder a altos puestos de toma de decisiones, se insta a los Estados miembros a que consideren seriamente la posibilidad de designar a mujeres como candidatas".
El nombre del elegido se dará a conocer a finales de 2026, y el nuevo secretario general de la ONU asumirá sus responsabilidades el 1 de enero de 2027. La elección final requiere el consenso de los cinco miembros permanentes del Consejo que poseen derecho de veto: Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, China y Francia.
Además de la postulación de Grossi, también han hecho públicas sus candidaturas la exmandataria de Chile, Michelle Bachelet, y la exvicepresidenta de Costa Rica, Rebeca Grynspan.
Tradicionalmente, la secretaría general de las Naciones Unidas rota entre los distintos continentes (con la excepción de Norteamérica, que se considera ya con suficiente influencia), y el próximo turno geográfico le corresponde a la región de América Latina y el Caribe.
Rafael Grossi, el candidato argentino
El argentino Rafael Grossi, quien actualmente se desempeña como director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), confirmó semanas atrás su intención de suceder a Guterres.
"Solo hay que mirar lo que estoy haciendo. Ese soy yo", declaró Grossi durante una conferencia de prensa en la sede de la ONU. Al mismo tiempo, desestimó que su postulación vaya a interferir con su trabajo actual: "Por el contrario, creo que lo que hago al frente del AIEA habla más que las palabras, visiones, promesas e ideas que podría tener como secretario general".
Grossi es un politólogo egresado de la UCA y diplomático de carrera. Asumió la dirección del OIEA, el organismo encargado de garantizar el uso pacífico de la energía atómica, a fines de 2019, tras el fallecimiento de su predecesor, Yukiya Amano, convirtiéndose así en el primer latinoamericano en ocupar dicho cargo.
Su gestión al frente del OIEA ha estado marcada por el conflicto sobre el programa nuclear de Irán —cuya verificación está a cargo de su agencia— y por la guerra en Ucrania, específicamente en la planta nuclear de Zaporizhzhia, que está bajo control ruso desde marzo de 2022. El diplomático argentino lideró personalmente misiones en la central, donde su equipo y él mismo estuvieron en medio de hostilidades. Su insistente solicitud de establecer una zona de protección alrededor de la planta subraya tanto la seriedad del peligro como su determinación de posicionar al OIEA como un actor clave en la prevención de una catástrofe.
Previamente, Grossi fue embajador argentino en países como Austria, Eslovenia y Eslovaquia. Además, entre 2009 y 2013, ejerció como director adjunto para Asuntos Políticos y jefe de Gabinete de Amano dentro de la dirección general del OIEA.
Otras postulantes femeninas y el llamado por la Paridad
Otra figura clave que ha anunciado su candidatura es Michelle Bachelet, la expresidenta chilena. El actual presidente de Chile, Gabriel Boric, fue quien la postuló, asegurando que cuenta con el respaldo de su nación y manifestando que es el momento de que una mujer tome el liderazgo del organismo.
Durante su última comparecencia ante la Asamblea de las Naciones Unidas, Boric destacó la trayectoria de Bachelet, tanto a nivel nacional —con dos mandatos como jefa de Estado de Chile— como en su experiencia internacional, donde fue presidenta de ONU Mujeres y Alta Comisionada para los Derechos Humanos.
El mandatario chileno enfatizó: "Quiero decirles que el equilibrio regional debe respetarse en este proceso. Este es el tiempo de América Latina y del Caribe. Somos una región sin guerras, con una rica tradición diplomática, forjadora de consensos y un compromiso inquebrantable con la Carta de Naciones Unidas desde su fundación. Enfrentar el desequilibrio histórico de género en las Naciones Unidas, en donde nunca un Secretario General ha sido mujer, es también un tema pendiente".
La propia Bachelet se refirió a la posibilidad de ocupar el puesto, afirmando: “Sin duda creo que Naciones Unidas ha jugado y va a seguir jugando un rol fundamental en un país, un mundo de paz, un mundo donde todos vamos a tener una vida mejor, así que mi compromiso es ese”.
Finalmente, la tercera candidata confirmada hasta ahora es Rebeca Grynspan, exvicepresidenta de Costa Rica y actual directora de la Agencia de la ONU para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD).
Grynspan fue la segunda al mando en el gobierno de Costa Rica entre 1994 y 1998, durante la presidencia del centrista José María Figueres. Su carrera también incluye cargos como viceministra de Hacienda y titular de las carteras de Vivienda y Asuntos Económicos.
