El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, apuntó contra el gobierno de Javier Milei y le reclamó que le devuelva a la provincia el dinero que le debe.
"Si el superávit es a costa del esfuerzo de la gente, si es con la plata de la educación, la salud y la seguridad, no es un superávit: es una transferencia de recursos a los sectores concentrados", expresó a través de redes sociales.
"Ese refuerzo que estamos reclamando ante la Corte Suprema es el que se robó Milei. Se robó la de los jubilados, se robó la de las provincias, se robó la de los docentes, la del CONICET, la de las universidades", sostuvo el gobernador.
Y remarcó: "miren que fácil es festejar que uno tiene un superávit y le sobra plata si no paga los servicios en su casa, si no paga el transporte, si no le paga a los que laburan".
"Venimos a decirle a Milei ´devolvele a la provincia, al laburante, al jubilado la que le robaste para darle a tus amigos del extranjero, para darle a los timberos, para darle a la criptomoneda, para darle a los delincuentes de la especulación y de la timba´. Plata hay Milei pero no es tuya, es de nuestra provincia", indicó.
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Axel Kicillof denunció a la SIDE por espionaje ilegal: “Es urgente que se investigue”
Este miércoles, Axel Kicillof, gobernador bonaerense, presentó una denuncia formal ante el juez Alejo Ramos Padilla por un presunto espionaje ilegal.
El objetivo de la acusación es claro: que la Justicia investigue las maniobras de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) en su contra, y en contra de varios de sus colegas políticos.
Todo arrancó con la filtración de un informe titulado Hechos previstos 09JUL25, al que accedió el periodista Hugo Alconada Mon.
En el mismo, se detallan seguimientos y operaciones de inteligencia ilegal a Kicillof, Máximo Kirchner, Sergio Massa y Facundo Manes.
No solo eso: también se menciona la vigilancia a protestas sindicales y manifestaciones en las calles contra el gobierno de Milei.
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Kicillof denuncia espionaje de la SIDE: “Es una amenaza para la democracia”
En su presentación, Kicillof no dejó margen a la duda: “Lo que está en juego no es solo una cuestión política, sino la salud misma de nuestras instituciones democráticas”, dijo al salir del juzgado de La Plata.
La denuncia no fue una sorpresa: ya lo había anticipado en varias declaraciones, pero finalmente este miércoles se hizo realidad.
El gobernador explicó que la SIDE, bajo el mando de Sergio Neiffert, parece haber cruzado límites muy peligrosos. “No podemos permitir que el aparato del Estado se utilice para perseguir a opositores o simplemente para monitorizar a quienes se oponen al poder de turno”, remarcó con vehemencia.
Kicillof solicitó que se investigue si hubo “delitos de acción pública”, pero también remarcó la importancia de dejar en claro quiénes estuvieron detrás de esas decisiones.
La denuncia no solo involucra a su figura, sino a toda una serie de dirigentes políticos, incluidos los sindicalistas que se manifestaron contra el gobierno de Milei.
Lo más grave, según expertos en derechos humanos, es que la filtración podría violar el artículo 4 de la Ley de Inteligencia Nacional, que prohíbe espiar por razones políticas o sociales. Si se confirma, tendría un fuerte impacto judicial y político.
No es la primera vez que se levantan sospechas sobre el uso indebido de los servicios de inteligencia. La CTA de los Trabajadores y la CTA Autónoma también denunciaron públicamente lo que consideran un abuso del aparato estatal.
