En medio del fragor por el anuncio del gabinete nacional, el presidente electo Alberto Fernández sorprendió a todos reuniéndose con el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
En lo que fue un encuentro ameno, libre de las asperezas que origina la tan mentada grieta, Fernández insistió nuevamente a Larreta con el pedido de sacar las rejas que dividen en dos la Plaza de Mayo.
Al ser jurisdicción de la Ciudad, es necesaria la aprobación por parte del Ejecutivo porteño, Larreta no mostró objeciones y las rejas serán levantadas. Aún no se sabe si podrá ser antes del 10 de diciembre, cuando asuma el presidente en una masiva fiesta popular junto a Cristina Kirchner.