La causa por la muerte de Thiago Correa sumó una nueva resolución: no le concedieron la libertad al policía acusado, que continuará preso mientras avanza la investigación.
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El efectivo, identificado como Facundo Aguilar Fajardo, de 21 años, está imputado por “homicidio simple con dolo eventual”, que según el artículo 79 del Código Penal, puede traer una condena de entre 8 y 25 años de prisión.
Durante su declaración ante el fiscal Diego Rulli, el efectivo aseguró: “Prefería que me maten a mí antes que Thiago”. La acusación se sostiene en que habría disparado de forma que puso en riesgo la vida de personas ajenas al enfrentamiento
Ratificaron la prisión al policía que mató a Thiago Correa durante un tiroteo
El policia relató que todo empezó cuando cuatro delincuentes intentaron atacar a él y a su madre. “Si no hubiese sido por esos cuatro delincuentes, que querían matar a mi mamá y a mí, no habría actuado y Thiago seguiría vivo”, afirmó.
Además, contó que desde el día del hecho no puede dejar de pensar en su hermano de 11 años: “Él va a la escuela, y que le pase algo parecido a lo que le pasó a Thiago, que lo roben o que resulte herido o muerto… eso no me deja dormir”.
Sobre el momento en que disparó, explicó que estaba “focalizado” en los agresores y solo quería que se fueran del lugar. “Lo único que quería era que se fueran”, dijo.
También describió la zona como “muy oscura” y con obstáculos visuales como postes de luz, una parada de colectivos y comercios, y aseguró: “Imposible que haya visto bien”.
En paralelo, este miíercoles cayó detenido Joaquín López Otto, uno de los sospechosos que estaba prófugo.
La balacera dejó un muerto, Brandon Corpus (18), quien recibió seis disparos, y dos heridos, Uriel Montenovo, con un balazo en la pierna, y Uriel Leiva, en estado crítico tras recibir un disparo en el abdomen.
Declaró el policía que mató a Thiago Correa: "En ningún momento se me pasó por la cabeza que a 200 metros iba a estar un nene”
Facundo Aguilar Fajardo, el policía de la Ciudad que baleó accidentalmente a Thiago Correa, el niño de 7 años que murió a las 48 horas, declaró hoy ante la Justicia por segunda vez, luego de un pedido para que reconstruya con su testimonio cómo fueron los hechos.
El agente Fajardo declaró ante el fiscal Diego Rulli, de la Fiscalía de Homicidios de La Matanza, y expresó en su declaración: “Prefería que me maten antes de que Thiago hubiese muerto”.
En su defensa, el policía insistió en la culpabilidad de los delincuentes que lo había atacado: “Si no hubiese sido por estos cuatro delincuentes, que querían matar a mi madre y a mí, no hubiese actuado y hoy Thiago estaría vivo”, sostuvo.
El hecho ocurrió la semana pasada, en la localida bonaerense de Ciudad Evita, partido de La Matanza, allí el policía enfrentó un supuesto intento de robo por parte de cuatro sujetos, a quienes les disparó once balazos mientras huían. “En ningún momento se me pasó por la cabeza que a 200 metros iba a estar un nene”, afirmó el policía.
El oficial expresó que le genera pesar lo sucedido y piensa en su hermano de 11 años, quien podría pasar por la misma situación: “Él va a la escuela, y que le pase lo que le pasó a Thiago, o que le roben, o que en pleno robo resulte herido o muerto… es algo que no me deja dormir”.
Además, intentó excusarse de lo sucedido aludiendo que en ese momento estaba “focalizado” en los agresores, con el único objetivo de que se fueran del lugar. “Lo único que quería era que se vayan”, aseguró.
Finalmente, describió el lugar como “una zona muy oscura”, con varios obstáculos visuales, como postes de luz, una parada de colectivos y diversos comercios. “Imposible que haya visto”, subrayó.
El fiscal Rulli evalúa el pedido de reconstrucción del hecho, mientras continúa la investigación que generó conmoción en toda la comunidad.
Cómo fue que balearon a Thiago
El nene había sido internado el lunes pasado en gravísimo estado, con diagnóstico de muerte cerebral, luego de recibir un disparo en medio de un enfrentamiento que ocurrió cuando regresaba del colegio con su mamá.
Thiago volvía del colegio con su papá y esperaban el colectivo en una esquina de La Matanza cuando una bala le atravesó la cabeza.
Había quedado en medio de un tiroteo entre un policía y un grupo de ladrones. Después de casi dos días internado en grave estado, falleció el siguiente viernes por la noche.
Todo pasó el miércoles, cerca de las 22.30, en avenida Crovara y Madrid, a la altura de Villa Madero. Fabián, su papá, lo llevaba en hombros para ir a la casa de la madre del chico.
Fue en ese momento cuando, según la investigación, un agente de la Policía Federal vestido de civil fue interceptado por cuatro personas armadas.
El policía se identificó, sacó su arma y se desató el tiroteo. En el medio, Thiago recibió un disparo en la cabeza. Su padre todavía no puede entender lo que vivió. “Cuando lo agarré en brazos, me dijo ‘pá’ y ya no habló más”, contó entre lágrimas.
Una vez que pidió ayuda, un automovilista que pasaba por la zona los llevó al hospital de niños de San Justo. Desde entonces, el estado de Thiago fue crítico. Tenía muerte cerebral y los médicos no pudieron hacer nada más.
