El Servicio Meteorológico Nacional declaró el estado de alerta amarilla en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y diversas provincias del país ante la inminencia de la primera ola de calor de la temporada. Esta advertencia, que se extiende a regiones de La Pampa, Córdoba, San Luis, Chaco y Formosa, responde a un fenómeno de temperaturas elevadas que persistirá hasta el último día del año, potenciado por la escasez de lluvias y la baja humedad.
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El pronóstico para este lunes anticipa un cielo ligeramente nublado con marcas térmicas situadas entre los 21° C y los 35° C, marcando el inicio de una escalada de calor que alcanzará su punto crítico a mediados de semana.
Para el martes 30 de diciembre, el termómetro continuará en ascenso con una mínima de 26° C y una máxima de 37° C, bajo condiciones de vientos leves y nula probabilidad de precipitaciones. El miércoles 31 de diciembre se perfila como la jornada de mayor impacto térmico del periodo, con valores que oscilarán entre los 27° C y los 38° C, aunque se advierte que la sensación térmica podría superar ampliamente dichas cifras; para este día se esperan cielos parcialmente nublados y ráfagas de viento de hasta 31 km/h.
El alivio llegaría recién el jueves 1 de enero, con un descenso térmico que fijará mínimas de 19° C y máximas de 30° C, seguido por un viernes 2 de enero aún más templado, con registros entre los 19° C y 28° C. Finalmente, para el sábado 3 de enero, el portal Meteored anticipa un cambio de patrón con una probabilidad del 30% de lluvias débiles.
Recomendaciones para la salud
Ante este escenario de peligrosidad para la salud, especialmente en menores de edad y adultos mayores de 65 años, el Colegio de Médicos de la provincia de Buenos Aires emitió una serie de recomendaciones esenciales para prevenir cuadros de deshidratación o el temido golpe de calor. Los expertos enfatizan que la hidratación adecuada es la principal barrera preventiva y sugieren beber agua de forma constante sin esperar a manifestar sed. Asimismo, se recomienda reducir la ingesta de alcohol, cafeína y bebidas con alto contenido de azúcar, mientras que en el caso de lactantes, se aconseja incrementar la frecuencia de las tomas y reforzar la hidratación materna.
En cuanto a la protección física, los profesionales médicos instan a evitar la exposición solar directa y la actividad física intensa entre las 10:00 y las 17:00 horas. Se sugiere el uso de indumentaria clara, liviana y de fibras naturales, además de protección ocular con filtro UV, sombreros y el uso de protector solar con factor mínimo de 30, aplicado treinta minutos antes de salir y renovado cada dos horas. Respecto al golpe de calor, considerado una emergencia médica, los signos de alerta incluyen fiebre superior a 39°C, piel seca y caliente, mareos, náuseas o confusión; ante estos síntomas, es imperativo contactar a emergencias, trasladar al afectado a un sitio fresco y aplicar paños húmedos, evitando la administración de antifebriles y ofreciendo agua únicamente si la persona está consciente.
