Una vez más, los trabajadores del Hospital Garrahan se hicieron escuchar en las calles de la Ciudad de Buenos Aires, al realizar la "Caminata de Velas", una protesta en la que reclamaron por mejoras salariales y mejores condiciones laborales.
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La movilización comenzó en la intersección de Callao y Corrientes, y culminará en el Obelisco, en una manifestación luminosa con velas, linternas y carteles en alto.
Los trabajadores del hospital, que es el principal centro pediátrico del país, denuncian el vaciamiento progresivo de la institución, una de las más importantes para la atención de niños y niñas.
Caminata de Velas: médicos del Garrahan marchan en defensa de la salud
En los pasillos del hospital, se escasean insumos esenciales, y el personal vive con una profunda angustia debido a los bajos salarios y a la precarización laboral que afecta a una gran parte de los profesionales.
Los trabajadores también aseguran que muchos de ellos tuvieron que migrar o abandonar el hospital debido a la falta de poder adquisitivo y la desidia oficial.
En medio de esta situación, el compromiso de los trabajadores sigue siendo firme. En la última jornada de protesta, se realizaron trasplantes y neurocirugías simultáneas, dejando claro que, a pesar de las adversidades, la atención no para.
"La salud de miles de niños está en juego", enfatizaron desde la organización, mientras intentan visibilizar el deterioro de un sistema de salud que, aseguran, se sostiene a pulmón.
A lo largo de la movilización, los trabajadores reiteraron su llamado a la urgencia de soluciones por parte del gobierno para frenar lo que consideran una "crisis de fondo" que afecta la calidad de la atención que reciben los niños y niñas del país.
Según indicó Lipcovich, trabajador del Garrahan, si el gobierno no ofrece una solución, las medidas de protesta aumentarán. “Si siguen ignorándonos y no hay propuestas reales, no nos quedaremos de brazos cruzados. Tomaremos medidas dentro del hospital para exigir lo que nos corresponde", aseguró.
El contexto de la movilización trasciende las estrictas demandas salariales. Según los dirigentes sindicales, este conflicto refleja una crisis más profunda que involucra la defensa del sistema de salud pública.
“No se trata solo de salarios. Estamos luchando por la salud pública en general. El Gobierno no entiende que estamos defendiendo los derechos de miles de argentinos que dependen de este hospital”, agregaron.
En medio de la tensión, Lipcovich hizo duras críticas a la paritaria firmada por el gremio UPCN. “Es una burla lo que hicieron. Firmaron una paritaria que ni siquiera cubre la inflación. Y lo peor es que esta es la oferta que van a aplicar en el Garrahan”, declaró.
La paritaria en cuestión incluye aumentos ínfimos del 1,3% para los meses de junio, julio y agosto, y del 1,2% y 1,1% para septiembre y octubre, respectivamente. Además, UPCN firmó bonos que consideran insuficientes frente a la situación actual.
Las acciones de protesta no se detendrán con la caminata de este jueves. Los trabajadores anunciaron que el sábado se reunirán con organizaciones sociales para definir las próximas medidas.
También se convocó a una nueva asamblea general para el miércoles 6 de agosto, donde se definirán las nuevas formas de lucha que seguirán adelante si el gobierno sigue desoyendo los reclamos.
